AQUELLOS FARAONES DE HUASEQUI, ZUÑIGA, MIRANDA Y COMPAÑÍA ¡QUE CLASE DE TRABUCO SEÑORES!
Por: Paco Gómez. Julio del 2011
A lo largo de los últimos veinticinco años, los aficionados al beisbol que siguen de cerca el Campeonato Estatal han visto en acción equipos bien conformados, algunos con excelente pitcheo, otros con una línea de bateadores de espanto, los ha habido también con una defensiva de excelencia, pero si hablamos de los Faraones de Nuevo Casas Grandes de principios de los noventas, yo creo que mucha gente estará de acuerdo conmigo en que éste trabuco se cocina aparte.
Aquellos Faraones campeones en 1990 y 1991 lo hacían todo, y todo lo hacían bien.
Por ejemplo, a la defensiva tenían una espina dorsal que podía darse el quien vive con los mejores. En la receptoría estaba Conrado Miranda, en las paradas cortas Héctor Guízar, en la segunda Rodrigo Rosas y en el jardín central Marcelo Juárez.
Canela pura.
En la primera base Fernando Cruz, en la tercera Raúl Mena, en los jardines, aparte de Marcelo, se alternaban Macario Pérez, Marcos Vargas y Jorge Ramírez. Jorge Cazares era el segundo catcher, y cuando se necesitaba, salían de la banca Alfredo Casas, Jorge Ramírez, Fernando Chávez, Oscar Rodríguez, Ernesto Quintana, Juan Pérez, Miguel Torres y Fernando Chávez. Amén de muchos otros que pasaron por las filas de los Faraones a lo largo de tres años.
Y falta todavía lo mejor: el staff de pitcheo. Agárrese.
Juan Diego Huasequi, Juan el Cañón López, Felipe Hernández Muñoz, Rolando Zuñiga, Manuel el Cañoncito López, Leodegario Longoria, Héctor Duarte, Arturo Renova y Ernesto Lucero. Hágame usted el fabrón cabor.
¡ A tocar la bola desde la primera entrada, señores manejadores de los equipos contrarios ! Actualmente muchos lo siguen haciendo nada más porque les faltan recursos o imaginación.
Este trabuco tenia al frente al malogrado Manuel Galaz Aguilera, uno de los managers más astutos y dedicados que yo he visto a lo largo de mis veinte años dentro de la crónica beisbolera.
Ponga usted todos estos ingredientes en un campo de juego y obtendrá como resultado una máquina casi perfecta de jugar beisbol. Puro cocer y cantar.
Con todo y que los enfrentamientos entre los Indios y los Faraones no pueden ser considerados como un clásico, si han escrito juntos algunas páginas interesantes de la historia de la pelota estatal.
Veamos.
En 1991, en el Luis Cobos Huerta, los hermanos Mora Villa ( Sergio, Mario y Armando ) realizaron un triple play. Una marca casi imposible ya no digamos de superar, sino de empatar siquiera.
En 1992, en el Jaime Canales Lira, Jorge el Bendito Solis le conectó cuatro cuadrangulares en otras tantas veces al bat al pitcheo faraón: dos a Rolando Zúñiga, uno a Héctor Duarte y uno más a Ernesto Lucero.
En el 2000, último año en que los Indios fueron campeones, se enfrentaron en los cuartos de final a los Faraones, dirigidos entonces por el Teco Víctor Manuel Flores, y la tribu no solamente se dio el lujo de dejarlos fuera de la pelea, sino que Alejandro Rivera les tiro un juego sin hit ni carrera.
Los Indios y los Faraones se verán nuevamente las caras en la ronda final del campeonato estatal de este año.
Yo no se quien gane y quien pierda, lo único cierto ( y se los firmo ) es que la diversión está asegurada.
Hasta la próxima.